Cuando se toma verdadera conciencia de la necesidad de cuidar de uno mismo para vivir de una manera saludable y en armonía con el entorno, es hora de adquirir hábitos sanos.
- Una de las mejores maneras de incluir estos nuevos hábitos en nuestra rutina diaria es aplicando pequeños cambios que tendrán un impacto muy positivo en nuestro bienestar físico y mental y que te ayudarán a sentirte mucho mejor contigo mismo y con el entorno.
La importancia de una dieta saludable
1. Comer sano
es uno de los principales propósitos si quieres aumentar tu bienestar. Es que de esta manera le estarás ofreciendo a tu cuerpo todas los nutrientes necesarios para afrontar tu rutina de manera productiva y con el ánimo y la motivación debida.
- Un buen comienzo para lograr este cometido es no incluir en tus surtidos o listas de compras en el supermercado aquellos artículos indeseados (galletitas, alfajores, papas fritas, refrescos, etc.) de manera que definitivamente no entren en tu hogar.
Ten permitidos:
Te aconsejamos que limites este tipo de ingesta de alimentos no deseados solo a los fines de semana, a salidas puntuales a un restaurante o para cuando acudimos a algún encuentro social.
¡Sin dudas que será un gran comienzo y empezarás a notar rápidamente los cambios sin dejar de disfrutar en su medida de algunas comidas!
Planificación:
- Te alentamos además a que planifiques un menú semanal que incluya variedad de carnes, pescado, huevo, verduras, frutas y cereales y fundamentalmente bebas una buena cantidad de agua todos los días.
- ¡Incluir esta batidora portátil para tus jugos o batidos saludables va a serte muy útil, y más aún si no cuentas con demasiado tiempo para desayunar y/o merendar ya que podrás prepararlo rápidamente y trasladarlo a donde sea!
2. Realiza ejercicio y medita de manera periódica
Además de la alimentación, es siempre beneficioso cuidar nuestra salud física y mental. Hacer ejercicio, caminar, practicar algún deporte en particular, hacer yoga o meditar, mejoran ampliamente nuestro bienestar y nuestra calidad de vida.
- También somos conscientes que con las rutinas cada vez más intensas de la actualidad y con las demandas laborales y familiares se hace difícil encontrar el momento idóneo.
- Lo bueno es que no necesitamos más que unos pocos minutos al día para dedicarle a la actividad física de nuestra preferencia o para meditar. Con un puñado de minutos de calidad e intensidad estaremos brindándonos momentos de autocuidado que significarán un cambio muy importante.
¿Cómo puedo propiciar estos momentos en mi hogar?
Dejando una esterilla accesible en el living o en tu cuarto te recordará que tienes que aprovechar un momento para mejorar tu salud física y mental.
¿Te interesa saber más sobre este tema? Te dejamos el link de nuestro artículo 6 Claves para transformar el hogar en tu lugar de entrenamiento ¡Con todos los tips que necesitas para entrenar en casa!
3. Consume agua purificada
Cuando bebemos agua filtrada y purificada, le ahorramos a nuestro cuerpo el trabajo de depuración y le ayudamos a mantenerse más sano, y esto repercute directamente en nuestra salud y vitalidad.
- Esto sin lugar a dudas va de la mano de la elección de comer alimentos más sanos como explicamos al principio del artículo entendiendo que todo lo que ingerimos tiene un impacto directo en nuestra salud.
¿Por qué beber agua purificada?
Nuestro sistema digestivo está diseñado para incorporar todas las propiedades beneficiosas de los alimentos, almacenar la energía sobrante en forma de grasa por si hiciera falta en el futuro, y filtrar los elementos nocivos o inservibles.
- Entre estos últimos se encuentran los tóxicos, las toxinas y las bacterias, con los que nos vemos obligados a convivir y consumir.
- Cuando bebemos agua filtrada y purificada, le ahorramos a nuestro cuerpo el trabajo de depuración y le ayudamos a mantenerse más sano, y vital.
3. Ventila correctamente los ambientes
Algo similar a lo que expresamos antes con respecto a lo que ingerimos, sucede con el aire que respiramos. Por ello, tener un sistema de filtración de aire en nuestro hogar es muy importante para mejorar nuestra calidad de vida.
- Ventilar los ambientes de manera correcta y contar con un purificador de aire, son buenas prácticas que nos ayudarán a eliminar estos patógenos, protegiendo así tu salud y la de tu familia.
4. Elimina los productos químicos de la limpieza
Para protegernos de las bacterias se suele recurrir a productos de limpieza y de desinfección que en muchas ocasiones contienen elementos tóxicos que forman parte de su formulación.
- De esta manera y en el afán de desinfectar los ambientes nos exponemos a otros tipos de peligro ya que muchos de estos productos suelen ser muy dañinos para la salud.
Por esto, procura utilizar productos de limpieza naturales y/o caseros o en todo caso, lee detenidamente el contenido de las etiquetas para ver a qué sustancias te verás expuesto o expuesta y puedas así tomar las medidas necesarias.
¿Qué te han parecido estos consejos? ¡Sigue estos prácticos y efectivos consejos para aplicar en tu vida cotidiana y en tu hogar y mejora definitivamente tu calidad de vida!