Mantener la cocina limpia sin matarte en el intento no es un mito, es una cuestión de estrategia. Aquí no vamos a hablarte de rutinas imposibles ni de métodos que solo funcionan en casas de revista. Vamos a lo práctico, a lo que de verdad te hará la vida más fácil.
1. Limpia mientras cocinas (sin sentir que trabajas en una fábrica de limpieza)
Si cada vez que usas un utensilio lo enjuagas de inmediato, evitas que la pila de trastes crezca como si tuviera vida propia. Y si te cae una gota de salsa en la encimera, la limpias en el momento antes de que se convierta en una pintura rupestre adherida a la superficie.
2. Usa productos que hagan el trabajo por ti
Hay productos que no solo limpian, sino que te ahorran la pelea cuerpo a cuerpo con la grasa. Al final de este articulo puedes ver una recomendación de productos que ayudaran a mejorar los tiempos y trabajos de limpieza en tu día a día.
3. El truco de la esponja mágica
Si todavía no has probado esas esponjas blancas que eliminan manchas con solo agua, te estás perdiendo un invento que parece salido de un laboratorio de magia. Sirven para la estufa, los azulejos y hasta las paredes si te pones en plan limpieza total.
4. No dejes que el fregadero sea un imán de platos sucios
Si te acostumbras a no dejar nada en el fregadero por más de 10 minutos, te ahorras la visión apocalíptica de platos acumulándose. Además, limpiarás más rápido porque no tendrás que frotar con la fuerza de un guerrero medieval para despegar los restos de comida.
5. El bicarbonato y el vinagre: tus nuevos mejores amigos
Si tienes una sartén que parece tener una capa extra de suciedad adherida por voluntad propia, haz esto: ponle un poco de bicarbonato, agrégale vinagre y deja que burbujee como experimento de ciencias. Luego, un ligero restregado y listo.
6. Los paños de microfibra: pequeños genios de la limpieza
Olvídate de las servilletas de papel que solo esparcen la suciedad. Un buen paño de microfibra levanta todo con una pasada y, lo mejor, puedes reutilizarlo sin sentir que contribuyes a la deforestación mundial.
7. La regla de los 5 minutos
Dedica 5 minutos después de cada comida a limpiar. No hace falta convertir la cocina en un quirófano, solo deja todo decente. A la larga, esos 5 minutos te ahorran sesiones de limpieza maratonianas que nadie quiere hacer.
8. Algo extra que te puede interesar…
Si no quieres pasarte la vida luchando contra el aceite y los restos de comida, hay productos que simplifican el proceso (sí, algunos de los que tiene MilGenial). Pero esto es solo si quieres llevar tu nivel de limpieza al siguiente nivel sin esfuerzo.
Conclusión: La clave no es limpiar más, sino limpiar mejor y con menos esfuerzo. Usa los trucos adecuados, ten los productos que realmente faciliten la vida y conviértelo en algo casi automático. Porque, seamos sinceros, nadie quiere pasar más tiempo limpiando la cocina del necesario.
3 comentarios
Freddy Rivero
Exelente, muy interesante tener en cuenta lo que sugieren..
Esther
CUÁL ES LA ESPONJA MÁGICA?
Silvio Marrero
Muy bonitos y aparentemente prácticos.