En tu hogar no es necesario tener una gran superficie y tampoco importa cómo sea este ambiente; lo ideal es que aporte vitalidad, ganas de permanecer, de trabajar, vivir y disfrutar. Lo que sí resulta fundamental es mantener tu cocina limpia y ordenada, con la mesada despejada, los estantes y comida ordenada.
¿La visualizas pero no sabes que hacer o cómo comenzar? A continuación te daremos 3 lineamientos claves que deberías seguir para lograrlo.
1- El ambiente modifica totalmente tu día y estado de animo
Sin descuidar el sentido común y la funcionalidad de los espacios y de los elementos, dale prioridad al ambiente del cada sector. Porque ¿A quién no le gusta tomar un delicioso café en la mañana en un ambiente bonito, ordenado, que transmita paz?
Ese grado de satisfacción es el que debemos encontrar en todo lo que compone nuestra cocina.
- Cada elemento debe ser un reflejo de nuestra esencia, de bienestar, de los recuerdos que despierta y de los sueños que proyecta, y de todo aquello que cada uno de nosotros entendemos por felicidad.
2- Desechar lo que no utilizamos.
Muchas veces resultamos demasiado apegados a cuestiones materiales que en muchos casos no utilizamos o usamos muy poco. Hacer un esfuerzo por detectar estos elementos en nuestra cocina y por desecharlos luego, es un paso fundamental para lograr el orden y la armonía deseada.
- Para ésto te recomendamos que saques todos los utensilios y comida de los armarios y de la heladera y que los dividas en categorías para no abrumarte con ello. Platos, boles y cubiertos por un lado, tazas, copas y vasos por otro, cazuelas, ollas y sartenes, comida seca y comida fresca, etc.
Como ves son muchos elementos y lo mejor es hacerlo por partes para no abrumarte. También te recomendamos que lo hagas de un tirón por lo que es aconsejable que te reserves varias horas para ésta actividad.
3- Reubicar los objetos.
Ahora que nos quedamos sólo con aquellas cuestiones que nos generan orden, felicidad y funcionalidad (objetos que verdaderamente utilizamos), es hora de encontrarles un correcto espacio para cada uno de los objetos.
La clave para mantener la cocina limpia y ordenada es:
- Mantener la mesada despejada y guardar lo máximo posible dentro de los armarios o alacenas. Los armarios más cercanos y accesibles son para lo que utilizas en tu día a día, y los armarios más altos es aconsejable reservarlos para los objetos de menor uso.
- Es aconsejable guardar los productos similares cerca para facilitar su búsqueda sobre todo, cuando estás cocinando.
- También te sugerimos para un mayor orden y una mejor higiene, que quites la totalidad de los alimentos de sus envases originales y los guardes en frascos de vidrio, organizadores o dispensadores de alimentos como este dispensador de cereales
¡Esperamos que puedas contemplar estos elementos a la hora de ponerte en marcha para dejar tu cocina como te mereces!
Si quieres profundizar sobre este tema, en nuestro artículo 7 Consejos para una cocina organizada y eficiente encontrarás siete consejos imprescindibles para poder ordenar tu cocina de forma inteligente y aprovechando todos los espacios.