Está comprobado científicamente que una casa ordenada es sinónimo de salud, bienestar y felicidad. Combate el estrés y te ayuda a mantener bajo control el resto de tus actividades diarias como las comidas, el descanso, el ejercicio, etc.
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El orden te permitirá además optimizar tus tiempos, ya que encontrar los diferentes objetos será más sencillo y la actividad en si misma puede resultar divertida tanto para hacer de forma individual o involucrando al resto de la familia.
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Sabemos que mantener una casa ordenada no siempre resulta ser una empresa fácil. Por eso, te dejamos a continuación 7 TIPS muy sencillos y prácticos que hemos seleccionado para ti con el fin de que los puedas utilizar como guía ¡Y pasar rápidamente del caos al orden!
1 - Descarta las cosas que no uses.
Parece muy sencillo, pero lo cierto es que nos cuesta desprendernos de los objetos. Lo cierto es que las cosas inútiles, o que no utilizamos casi nunca, fomentan la acumulación y el desorden en nuestro hogar. Aplica el minimalismo y deshazte de todo aquello que no uses.
2 - Ordena por categorías.
Ordena por grupos de cosas (comida, ropa, libros, vajillas, electrodomésticos, etc.) La clave es pensar la casa de manera global y como un todo y no ordenar por habitaciones (uno de los principales errores). De esta manera sabes lo que realmente tienes y te ayudará también a decidir correctamente que es lo que verdaderamente necesitas y que no.
3 - Empieza por lo fácil.
Comienza por las cuestiones más sencillas, como puede ser la ropa. Deja para el final elementos como las fotos o recuerdos que tienen cierta carga emocional, tienden a consumirnos más tiempo y resulta más difícil desprenderse de ellos.
4 - Hazlo de una sola vez.
Si lo haces de golpe obtendrás resultados inmediatos y eso será muy motivante. El secreto es hacer una primera gran intervención para después mantener el orden diario haciendo pequeños ajustes.
5 - Ropa por colores.
Esto resulta clave para no perder el tiempo buscando e ir directamente sobre lo que deseas vestir.
6 - Aprovecha los espacios.
Optimiza los espacios de tu casa. Muchas veces no tenemos en cuenta las paredes, bajo escaleras o diferentes huecos que podemos utilizar para almacenar todo aquello que no nos cabe en los lugares habituales. En lo posible, compartimenta esos espacios para que las cosas no se mezclen y facilitar así su localización.
7 - Utiliza productos que agilicen tus tiempos.
Por qué tardar el doble realizando tareas cuando tienes miles de productos que simplifican tu día del hogar diariamente. Este es un factor a tener en cuenta, ya que aunque no parezca, reduce drásticamente el desgaste cotidiano del mantenimiento de nuestro hogar.